El panorama de los hospitales públicos del Quindío no es para nada distinto al del resto del país, sin embargo, tiene agravantes. Al ser el departamento más pequeño de Colombia, después de la Isla de San Andrés, en la que una muy buena porción de los usuarios ha estado vinculada de una u otra manera a la EPS que más ha mutado en Colombia, sus problemas empeoran.
Se trata de Saludcoop, que después cambió a Cafesalud y finalmente terminó en Medimás. Muchos dicen que la operación fue simplemente cambiar el aviso, pero todos los inconvenientes persistieron, al punto que en marzo pasado los 1,5 millones de afiliados a Medimás comenzaron a ser trasladados en todo el territorio nacional, el Quindío aportó 108.510 colombianos, es decir, casi el 10%, pero para la región fue devastador, porque más del 50% de todos los usuarios estaban vinculados a esa EPS.
Al ser la EPS con más afiliados en la región, desde luego es la que más deuda acumula con las IPS públicas y privadas. Las cuentas de los hospitales públicos indican que solo Medimás (ya liquidada) les debe cerca de 40 mil millones de pesos, lo que ya es una enorme complicación, por su casi imposible recaudo.
El médico Leonardo Quiceno Páez, actual director del Hospital Pio XII de La Tebaida y presidente de la Asociación Quindiana de Empresas Sociales del Estado, aseguró que del gran total de la cartera que asciende a 178.503 millones de pesos, el 43% ($78.335 millones) corresponde a EPS liquidadas tipo Medimás, lo que ya presupone que esos dineros están casi perdidos, porque lo mismo ha ocurrido con otras aseguradoras que no tienen con qué pagar ni siquiera la nómina atrasada de sus propios trabajadores.
La mayor de la deuda en el Quindío se concentra en el régimen subsidiado con $92.380 millones y el contributivo $36.036 millones. Por población pobre del departamento les deben $14.463 millones, entre otros rubros.
Quiceno Páez aseguro que, del total de la cartera, $72.854 millones tiene franco deterioro.