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En la noche del lunes se conoció que el presidente Gustavo Petro llegó a un acuerdo sobre la reforma a la salud con varios de los partidos políticos tradicionales, lo primero que dejó esta reunión es que ahora se mantendrá un sistema de salud mixto.
En el privado, las EPS pasarían a ser gestoras de salud y vida, que perderían algunas de sus funciones, «porque no van a recibir los recursos, no van a tener integración vertical ni van a tener posición dominante», según explicó Toro. A estas gestoras se les pagará 5% de administración, en la articulación de riesgo en salud.
El público, por otro lado, estará integrado por todas las redes de los hospitales públicos del país y los de nivel uno se convertirían en los Centros de Atención Primaria (CAP) que propuso la ministra Corcho.
La Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (Adres), pues su papel sí será ser un pagador único, aunque este cambio vendría con un periodo de transición.
Efraín Cepeda, director del partido conservador, mencionó que, en ese sentido, se mantiene el giro directo. «Continúan como gestoras de salud las actuales EPS para construir sobre lo construido, pero, con giro directo por parte de la Adres y sin integración vertical. Ese giro directo será paulatino mientras la Adres se prepara en un periodo de transición a convenir, que serán varios años, eso está sobre la mesa».
Sobre las deudas que tienen las EPS con los hospitales, dentro de lo que se habló con el presidente está la idea de que las acreencias de las que van a ser liquidadas las pague el Estado con el presupuesto nacional a varios años, es decir, con vigencias futuras.
