A pesar de la profunda crisis por la que atraviesa el sector de la salud, en la que se destacan tristemente flagelos como la más grande cartera de la historia sin pagar por parte de las empresas promotoras de salud, y a partir de allí, se desprenden una serie de anomalías que sumadas a la falta de recursos, generan consecuencias amenazantes a los prestadores de servicios de salud, especialmente los públicos, hay una luz al final del túnel, y esa esperanza se cifra en la actividad gremial, que defiende, protege y enaltece los intereses, que para este caso, son los intereses de los hospitales a cargo del Estado, aquellas instituciones que prestan servicios de salud especialmente a los colombianos más pobres y en los lugares más apartados, que es a donde las IPS privadas no llegan, porque sencillamente no es rentable para ese tipo de empresas brindar allí sus servicios.
La vida, el bien más preciado que tenemos los seres humanos prima por encima de todos los demás, sin embargo, algunos de los comportamientos de las EPS nos ponen a reflexionar seriamente, si para esas entidades, el interés supremo es precisamente ese u otros distintos, de orden material.
En esa lucha de salvaguardar la prestación de servicios con calidad y centrados en el usuario desde el sector público, agremiaciones como la Asociación de Hospitales y Empresas Sociales del Estado del Valle del Cauca, ASOHOSVAL, que es parte integral de la Asociación Colombiana de Empresas Sociales del Estado y Hospitales Públicos, ACESI, todos los días unen esfuerzos y buscan estar presentes en todos los escenarios posibles a nivel regional y nacional, en donde el tema de la salud es abordado por los diferentes actores del sector para generar capacidades para los hospitales asociados.
No se trata simplemente de una organización que denuncia los atropellos de las EPS, en esos escenarios, confirmamos nuestro compromiso, que es total, por la defensa de la salud pública. Por eso no nos limitamos a buscar espacios de concertación, negociación y de exigencia de los derechos de las empresas sociales del estado ante el gobierno y los órganos de control. Vamos mucho más allá.
A nivel departamental, en espacios como la Asamblea Departamental del Valle del Cauca hemos defendido a los hospitales públicos, toda vez que por las funciones de control político que les otorga la ley a los diputados, nos hemos reunido con ellos para informarles los detalles de la evolución del sistema de salud en la región. Así mismo, en la gobernación del Valle y otras administraciones locales acudimos para concertar y socializar las necesidades más apremiantes de los hospitales de los 42 municipios vallecaucanos.
Un merecido reconocimiento a la calidad
La labor en defensa de los hospitales públicos del Valle no para allí. En el ideal de apoyar los diferentes procesos internos de cada una de las empresas sociales del Estado locales, es necesario contar con procesos administrativos, financieros y estratégicos idóneos, que brinden el respaldo necesario para actuar como verdaderos voceros gremiales.
En ese sentido, ASOHOSVAL recibió de parte del ICONTEC la re-certificación por tres años más de Calidad bajo la norma ISO 9001:2008. Se destaca que en la última auditoría no se presentó ninguna no conformidad, lo cual habla muy bien de nuestros procesos internos. La Asociación fue la primera en obtener este sello de calidad a nivel nacional y ha sido ejemplo para otras asociaciones que defienden los intereses del sector salud en Colombia.
El 2016 ha sido un año muy importante para la asociación, porque incursionó en la formulación y ejecución de proyectos. Precisamente, estos últimos días inició la ejecución de un convenio con el Sena para realizar nueve acciones de formación a la red pública hospitalaria vallecaucana que beneficiará en temas de calidad, servicio al cliente y auditoría, a más de 2.000 trabajadores de los hospitales asociados y su cadena productiva. Estas acciones de formación se realizarán en alianza con la fundación Visión Salud.
Recientemente, ASOHOSVAL adelantó un cambio en la Dirección Ejecutiva, a través de un proceso de selección objetiva realizado por la Junta Directiva entre 5 candidatos. Asumirá el cargo a partir del 1 de agosto de 2.016 el Dr. Alex Napoleón Idrobo Hurtado, fonoaudiólogo con especialización en administración en salud, responsabilidad que ejercerá por los próximos dos años.
La organización se encuentra en equilibrio financiero y administrativo, con sede propia y en camino de consolidación de una nueva área de servicios para los Asociados, el área de proyectos, que busca ayudar aún más al sector hospitalario y al sector salud en general del Valle del Cauca.
